El secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, ha confirmado que las tres personas detenidas esta madrugada en Guipúzcoa formaban un "comando armado" que aún "no había iniciado su actividad terrorista", pero que "se encontraba en condiciones de actuar inmediatamente". Según ha destacado, "estaba en posesión de todo lo necesario".
En una rueda de prensa convocada para explicar los detalles de la operación antiterrorista iniciada esta madrugada en Guipúzcoa por orden del juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, Camacho ha destacado que las detenciones son "importantes" y que la operación llevada a cabo por la Policía Nacional ha tenido una "finalidad preventiva".
"Se ha evitado sufrimiento y dolor", ha afirmado Camacho, quien ha descartado que los detenidos tuvieran ninguna relación con los atentados cometidos en los últimos meses contra las obras de la línea ferroviaria conocida como 'Y vasca'. Asimismo, ha descartado que entre el explosivo incautado a los detenidos hubiera material relacionado con la confección de bombas lapa, método empleado en el último atentado de ETA que le costó la vida al inspector de la Policía Nacional Eduardo Puelles.
Según ha destacado el responsable de Interior, este es el tercer grupo de ETA desarticulado por la Policía Nacional en los últimos meses antes de que comenzara a cometer atentados.
Las tres personas detenidas son Patxi Uranga y Olatz Lasagabaster, arrestados en Usúrbil, y Ainara Vázquez, arrestada en Astigarraga. Se da la circunstancia de que esta última fue segunda suplente en la lista de ANV al ayuntamiento de Astigarraga en las municipales de 27 de mayo de 2007. La citada lista fue ilegalizada.
Junto a estas detenciones, la Policía Nacional ha realizado un total de cuatro registros en las localidades guipuzcoanas de Usurbil, Lasarte, Astigarraga y en San Sebastián, en los que se ha incautado 75 kilos de material explosivo. Además, se ha requisado numerosa documentación y material informático.
El material explosivo incautado contenía nitrato (unos 65 kilos), polvo de aluminio (10 kilos), 25 metros de cordón detonante y distintos utensilios para la confección de artefactos. Los detenidos habían recibido el material en una sola entrega procedente de Francia, según informaron fuentes de la investigación citadas por Europa Press.
Además de los explosivos, entre el material intervenido a los detenidos había un juego de grilletes, varios teléfonos móviles y dos 'walky talkies'.
Fuente: El Mundo.-